Ese plastico negro que volvió a brillar

 A principios de los años 90 el formato que había liderado los rankings de ventas de música por 40 años se estaba despidiendo para dejar paso al disco compacto que habia nacido en 1979.

Con el advenimiento de Internet y la descarga digital de música el que tuvo los días contados fue el CD,tal es así que este año se registra la peor caída desde el surgimiento del formato,el vinilo lo superó en este extraño  y pandemico 2020 y quizá tenga algo de justicia cultural ya que el formato plástico nos recuerda a épocas más felices,más allá de las cuestiones técnicas respecto del sonido y el arte.

En la Argentina la venta de  vinilos ha crecido de forma pequeña pero sostenida,sellos multinacionales editan vinilos de grupos argentinos y hasta los kioskos de diarios exiben material impensado hasta hace 10 años atras.Es importante destacar la labor que llevaron adelante sellos independientes que siguieron editando material en este formato cuando estaba practicamente extinto en los 90 y 2000.

Quiza la revalorizacion del formato nos permite pensar en un ritual parecido al que se genera cuando uno lee un libro en formato fisico,en mi caso particular no puedo leer libros en formato digital habiendomelo propuesto incontable cantidad de veces,en el caso de la musica la he consumido en todos los formatos existentes y la musica digital es una opcion como conocimiento de material viejo y nuevo pero no para que el disfrute sea completo ya que por cuestiones sonoras no se llega a apreciar todo el potencial de la musica ya que la informacion para la version digital es recortada y comprimida.No hace mucho me vinieron las ganas de comprar vinilos,un poco por la situacion economica y otro poco por los relatos de mi viejo (tuvo disqueria durante 10 años) de la magia del vinilo y toda la ceremonia de mirar la tapa,leer las letras y apoyar la pua sobre el disco,eso y ciertas ediciones horriblemente editadas en cd.

Ojala en todo el mundo vuelva a imponerse este entrañable formato que mas alla de ser un gran negocio para las companias discograficas tambien nos acerca a una forma de escuchar musica que tiene que ver mucho con hacer una pausa y apreciar arte en todo su esplendor.